31 octubre 2008

Tu espera

Embarcadero



Cuán larga es tu espera…

Sé que estás ahí. Te presiento,
casi a punto de doblar la esquina.
Pero tu rostro no acierto a ver
más allá de mis recuerdos,
y de mis sueños.

Tu ausencia se me clava
como una certera daga,
que con su filo atravesara
mi entero corazón.
Ahogado en la pena de tu ausencia.

Sin ti mis días
carecen de sentido,
y mis noches
se convierten en vela.
Viendo pasar eternas las horas.

Qué no daría yo
por verte llegar,
atravesando el camino
que nos separa.
Tras el umbral de mi ventana.

Cuánto deseo
abrazarte de nuevo,
saborear tu boca,
sentir tu piel,
acariciar tu pelo

¿Dónde estás? ¿Por qué no vuelves?
Cuán eterna se me hace esta espera.
Cuán desesperada es tu espera.

Confío en que tu barco zarpará ya de puerto,
con rumbo hacia mi destino.

Artea (2006)

Fotografía Fran Gómez

6 comentarios:

explotaexplotameexplo dijo...

Madeja de emociones a tu encuentro que se van enredando en el corazón, sensación de serenidad que te arropa, te inunda y te abandona... ¿cuándo volverás?

Artea dijo...

Volvió.
A su tiempo, pero volvió. :)

Anónimo dijo...

Tu sabes esperar...

Artea dijo...

Cuando no hay más remedio que esperar, hay que esperar.

Entre tanto, pueden hacerse muchas otras cosas.

La espera es más bien una actitud. Otra cosa distinta es "ir dejando pasar el tiempo".

:)

wala dijo...

no importa si este comentario llega tarde, pero las palabras que se señalan me llegaron a lo mas profundo de mi alma...gracias por expresar algo que no podia ponerle palabras
w

Artea dijo...

Hola Wala.-

Nunca se llega tarde a ningún sitio, si se vive en el presente.

El tiempo, en este contexto, es solo un idea, un pensamiento.... un lapsus.

Un cordial saludo.