Fotografía de madofthehill
Las palabras desempeñan para el individuo la misma función que para la sociedad. La historia viviente de la vida de una persona está en su cuerpo, pero su historia consciente está en sus palabras. Si no tiene memoria de sus experiencias, carecerá de palabras para describirlas. Pero si las recuerda, las traducirá en palabras que hablará o escribirá. En todo caso, una vez que la memoria se traduce en palabras, cobra una realidad objetiva, y más cuando estas palabras se expresan.
Alexander Lowen en Bioenergética.
PD.- Se me olvidó deciros que Javier está en su casa desde el pasado viernes.
Dejaremos descansar a la vela y al incienso. Se lo tienen bien merecido.
5 comentarios:
Y cuánta razón tiene este señor! Con frecuencia (mucha, me parece) basta con poner palabras a sentimientos y emociones para comprender(nos) mejor.
Abrazos pretos.
P.D. Me alegro que
Javier esté de vuelta en casa. Últimamente me rodean buenas noticias.
Buenas noticias :) . ya me alegro.
Hoy para mi ha sido dia de palabras, he ido a visitar la facultad de letras para ver pa dónde va mi futuro :P .
Hola Susana.-
Las palabras pueden ser, de una parte, el vehículo a través del cual conectan las almas... pero de otra, el camino que puede llevar a su desencuentro.
Conviene pues tenerlas tan claras como los silencios.
Un abrazo muy fuerte.
Hola Leodin DaCore.-
Y ¿dónde va tu futuro?.
Ya nos cuentas
Gracias a ambas por vuestro interés por Javier.
Oh, la palabra es un instrumento formidable. Uno puede enfermar por no ser capaz de expresar lo que lleva dentro. Encontrar las palabras apropiadas (sean propias o prestadas) que expresen el sentir del momento, puede ser algo liberador. Pero las palabras también pueden constituir una ilusión y un engaño formidable cuando no se entiende su naturaleza y por lo tanto se confunden con lo que aluden... Por mucho que miremos al dedo que señala, no podremos ver la luna.
Me alegra saber que Javier está mejor y todo evoluciona favorablemente.
Otro abrazo.
Hola Wuwei.-
Hasta de sus limitaciones tenemos al final que valernos para poder expresar aquello que, de otro modo, sería imposible hacer entender.
Cuidémoslas pues.
Gracias por tus palabras para Javier.
Un fuerte abrazo.
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